sábado, agosto 31

Llueve fuera

Llueve fuera.
Los lobos aúllan dirigiendo sus súplicas hacia mi ventana;
los cuervos, devoran mientras mis entrañas.

Lagrimas escapan dulces
recorriendo mis mejillas. Abrasador ácido.
Quema la piel.

Se desvanecen las ideas.
Sueños de libertad me postran en la cama.
Brota la bilis rebosando densa entre las costillas.

Llueve fuera.
Los lobos aúllan
suplicantes ante mi ventana.
Bellos cuervos negros,
niegan mi vida salvaje.

1 comentario:

gaia56 dijo...

¡Qué alegría volver a encontrarte!.
Yo también hablé de lobos hace poco tiempo.
¡Fuerza y... besinos.!