Día y noche te sientas en el alféizar de tu ventana.
Esperas la visita de quien aún no conoces, no es, ni existe.
Imaginas lunas, flores, árboles, vientos y brisas.
Acaricias palabras, lugares, instantes y luces.
Persigues sabores, sombras, besos y rincones.
Sin embargo; ignoras que, en otro lugar del mundo, alguien se imagina sentado a tu lado; en su ventana; con tu cabeza apoyada en su hombro.
Sin saber aún, que eres y existes.
3 comentarios:
Nena!! grata tu visita.. No solo son las ventanas, si no los taburetes afuera, que hacen la espera más entretenida?¿ jejeej
besazos...recibi la carta...respuesta tan pronto como el orden se restablezca en mi vida..
muaka
¡ya estás linkeada!
Pues esperemos que esté al otro lado del mundo, pero mejor un poco más cerca la espera ¿no?
Un beso
Toysareme,
bien es cierto que es muy importante hacer entretenida la espera.
Creo que, al fin, he conseguido poner en mi un banquito de madera bien situado al sol para esos momentos. Qué gusto.
Espero que el orden se reestablezca pronto en tu vida; de no ser así, deseo que el caos sea de lo más divertido.
Un fuerte abrazo.
Gaia,
gracias por el link. El otro lado del mundo, a veces, está más cerca de lo que pensamos.
Un fuerte abrazo.
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