Se repiten las mentiras,
me atormetan los recuerdos;
la desidia,
la falta de esfuerzo.
Me pesa estar siempre ahí,
para nada al final.
Me agota ser fuerte,
cuando no me quedan fuerzas para luchar.
Arrepentirse
tiene un precio,
ese mismo;
el del arrepentimiento.
Construir sobre la nada;
mantener una mentira,
a base de miedo, de necesidad;
por falta de tiempo.
Consumir la juventud que hoy,
me he dado cuenta,
no volverá.
Arrepentirse tiene un precio.
Difícil es cargarle a crédito
los errores a la vida.
Estoy en deuda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario